Un reciente estudio realizado por un grupo de investigadores de la Facultad de Enfermería, Fisioterapia y Podología de la Universidad de Sevilla observó el comportamiento sexual de los universitarios que estudiaban en su campus. Los resultados muestran que existe un desconocimiento de la sexualidad responsable y de los métodos de planificación familiar entre los estudiantes de la universidad.
Los estudiantes completaron un cuestionario que constaba de tres partes: variables sociodemográficas, experiencias sexuales y anticonceptivas, y una última parte sobre conocimientos y actitudes hacia las infecciones de transmisión sexual, así como sobre el uso de métodos anticonceptivos.
Las investigadoras de este estudio destacan el hecho de que el género es un condicionante importante cuando se habla de comportamiento sexual. Las chicas tienen una actitud más saludable y tienen más conocimientos sobre el uso de anticonceptivos y los controles de salud necesarios a esta edad. Ellas tuvieron su primera relación sexual dentro de una relación amorosa y era más probable que usaran algún tipo de anticonceptivo durante este primer encuentro. Las chicas tienen relaciones más duraderas y han tenido menos parejas sexuales durante el año anterior; además, visitan con mayor frecuencia a los profesionales sanitarios para aclarar sus dudas sobre la salud sexual y reproductiva. Sin embargo, tanto las las chicas como los chicos mostraron poca conciencia sobre el tema de las infecciones de transmisión sexual.
La investigación también reveló que todavía hay un alto porcentaje de jóvenes que tiene relaciones sexuales sin usar protección anticonceptiva o usa métodos que pueden ser poco confiables, como la abstinencia o el coitus interruptus; sobre todo, se nota cierta banalización de la frecuencia de infecciones sexuales en los jóvenes universitarios.
Otra variable que mostró diferencias interesantes fue el área de estudio de los estudiantes. Los estudiantes de las carreras relacionadas con las Ciencias de la Salud mostraron un comportamiento más saludable que sus compañeros de otros departamentos. Por otro lado, los estudiantes de ingeniería y arquitectura mostraron el comportamiento menos saludable.
Con estos resultados, los investigadores sostienen que los estudiantes universitarios no tienen un buen nivel de educación sexual. Aún mantienen muchos estereotipos sobre la sexualidad, más normalmente asociados a otros grupos generacionales.